En un operativo estratégico como parte de la política nacional de seguridad, Omar García Harfuch, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, anunció este lunes la captura de José Gregorio ‘N’, alias “El Lastra”, señalado como el principal operador de un centro clandestino de adiestramiento ubicado en el Rancho Izaguirre, en Teuchitlán, Jalisco. La detención fue resultado de un trabajo coordinado entre las fuerzas armadas y el gabinete de seguridad, atendiendo la instrucción directa de la presidenta Claudia Sheinbaum.

Durante la conferencia matutina, García Harfuch informó que, además de “El Lastra”, se logró la captura de dos personas más durante el pasado fin de semana. Las investigaciones revelaron que este sujeto operaba como reclutador para el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), actuando bajo las órdenes de Gonzalo ‘N’, alias “El Sapo”, uno de los líderes criminales con influencia en los estados de Jalisco, Nayarit y Zacatecas.

De acuerdo con las autoridades, José Gregorio ‘N’ asumió el control del Rancho Izaguirre desde mayo de 2024 hasta marzo de 2025, periodo en el cual organizó y dirigió un complejo sistema de reclutamiento para la organización criminal. Cabe destacar que “El Lastra” permanecía desaparecido desde hace cinco años, según registros de búsqueda emitidos por la Fiscalía de Chiapas. Además, es señalado como autor intelectual del secuestro de dos estudiantes en junio de 2024.

La captura de “El Lastra” se concretó el pasado jueves en la alcaldía de Cuajimalpa, Ciudad de México, mientras se desplazaba en compañía de una mujer. Tras su arresto, fue trasladado a la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO), donde será sometido a un proceso de investigación exhaustivo.

Las indagatorias indican que el método de reclutamiento implementado por este individuo era sofisticado y ampliamente difundido a través de redes sociales. Se promocionaban supuestas ofertas laborales con salarios atractivos, que oscilaban entre 4,000 y 12,000 pesos semanales, principalmente en funciones de seguridad. Estas publicaciones eran diseminadas en grupos cerrados, donde se dejaba claro que se trataba de actividades ilícitas.

Los aspirantes eran citados en centrales de autobuses y posteriormente trasladados al Rancho Izaguirre. Al llegar, se les despojaba de sus pertenencias y se les proporcionaba vestimenta táctica para iniciar un riguroso proceso de entrenamiento que se extendía durante un mes. Durante este periodo, los reclutas permanecían incomunicados y, según sus habilidades, se les asignaban distintas funciones dentro de la organización criminal.

La crueldad del sistema se evidenció cuando las autoridades revelaron que aquellos que intentaban escapar eran brutalmente sometidos, torturados e incluso asesinados. El objetivo del proceso de adiestramiento era fortalecer la estructura operativa del CJNG en diferentes estados.

El último encuentro registrado entre José Gregorio ‘N’ y Gonzalo ‘N’ tuvo lugar el 10 de marzo en Puerto Vallarta, Jalisco, donde recibió órdenes de concluir el proceso de adiestramiento y ocultarse. Tras pasar un breve periodo en Tala, decidió trasladarse a la Ciudad de México, donde finalmente fue detenido el 20 de marzo.

Esta captura representa un golpe significativo para las operaciones del CJNG y abre la puerta a nuevas investigaciones para desmantelar la red de reclutamiento que operaba en el Rancho Izaguirre. Las autoridades aseguran que continuarán trabajando para identificar y capturar a todos los involucrados en esta estructura criminal que ha generado preocupación y temor en la región.