Los rumores sobre el futuro de Martín Anselmi al frente de Cruz Azul han ganado fuerza en las últimas horas, señalando un posible interés del Porto, equipo de la liga portuguesa, en hacerse con los servicios del técnico argentino. Aunque inicialmente se mencionaba que un equipo brasileño había mostrado interés, ahora las miradas apuntan a Portugal, donde aparentemente las negociaciones han avanzado.

Según informes de TUDN, Anselmi y la directiva del Porto habrían llegado a un acuerdo, quedando pendiente el pago de la cláusula de rescisión, que rondaría los cinco millones de dólares. De concretarse, esto marcaría un paso significativo en la carrera del entrenador, quien estaría listo para asumir un reto en el fútbol europeo.

El caso recuerda la situación de Fernando Gago, quien dejó al Guadalajara para dirigir a Boca Juniors. De manera similar, si Anselmi abandona Cruz Azul, el club mexicano enfrentaría las consecuencias de una inversión significativa realizada este semestre. La directiva habría desembolsado cerca de 20 millones de dólares en refuerzos, entre ellos Jesús Orozco Chiquete, Omar Campos, Lukas Romero y Mateusz Bogusz, este último próximo a ser anunciado oficialmente.

Reemplazo Potencial

En caso de que Anselmi decida aceptar la oferta del Porto, el principal candidato para sucederlo sería Vicente Sánchez, actual técnico del equipo Sub-23 y pieza clave en el proyecto liderado por Iván Alonso, director deportivo de Cruz Azul.

Horas Clave Para El Futuro De Anselmi

Las próximas horas serán determinantes para definir si el técnico argentino continúa al frente del proyecto de Cruz Azul o decide emprender su camino en Europa. Mientras tanto, los aficionados del club se mantienen atentos a los posibles cambios, que podrían afectar la estabilidad del equipo en medio de la temporada.

El 17 de enero de 1942 nació en Louisville, Kentucky, Estados Unidos, Muhammad Ali, una figura legendaria que revolucionó el boxeo y trascendió como defensor de los derechos civiles. Falleció el 3 de junio de 2016, pero su legado permanece como un símbolo de grandeza tanto dentro como fuera del cuadrilátero.

En su etapa amateur, conocido como Cassius Clay, Ali se coronó con la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Roma 1960, en la categoría de 75-81 kg. Como profesional, a los 22 años se convirtió en campeón indiscutido de los pesos pesados tras derrotar a Sonny Liston en 1964. Fue el primer pugilista en ganar el campeonato lineal de peso pesado en tres ocasiones (1964, 1974 y 1978) y en obtener cuatro títulos mundiales de peso pesado (1964, 1967, 1974 y 1978).

Su estilo de boxeo rompió con las técnicas tradicionales, combinando una rapidez y agilidad inusuales en su categoría. Aunque fue dirigido gran parte de su carrera por Angelo Dundee, sus combates contra figuras como Joe Frazier, George Foreman y Ken Norton lo consolidaron como una leyenda. Seis de sus peleas fueron reconocidas como las mejores del año por The Ring. Además, su carácter irreverente y sus predicciones precisas lo convirtieron en un icono mediático.

Fuera del ring, Muhammad Ali dejó una huella imborrable en la historia social y política de Estados Unidos. Se opuso al reclutamiento militar durante la guerra de Vietnam, declarándose objetor de conciencia. Este acto le costó la suspensión de su licencia de boxeo y su título mundial, un sacrificio que marcó su lucha por los derechos civiles y la paz.

Como miembro de la Nación del Islam, desafió los estereotipos sobre los afroamericanos y, aunque inicialmente fue criticado, ganó el respeto mundial con el tiempo, especialmente tras su histórica victoria sobre George Foreman en 1974 en The Rumble in the Jungle.

A pesar de su retiro y los efectos del Parkinson en sus últimos años, Ali recibió múltiples reconocimientos: la Medalla Presidencial de la Libertad, su ingreso al Salón Internacional de la Fama del Boxeo, el título de Rey del Boxeo por el Consejo Mundial de Boxeo y Deportista del Siglo XX por Sports Illustrated y la BBC.

Muhammad Ali no solo es recordado como uno de los más grandes boxeadores, sino como un símbolo de resistencia, justicia e inspiración. Su legado trasciende el deporte, consolidándolo como una de las figuras más influyentes del siglo XX.

La destacada actriz británica Joan Plowright falleció el pasado 16 de enero a los 95 años, según informó su familia en un comunicado. Plowright murió en paz, rodeada de sus seres queridos, en Denville Hall, una residencia especializada para artistas en el Reino Unido.

Conocida por su extraordinario talento en el teatro, Plowright dejó una huella imborrable en los escenarios de Broadway en Nueva York y del West End en Londres. Además, tuvo una notable carrera en el cine, donde ganó dos Globos de Oro y consolidó su lugar como una figura icónica del arte dramático.

Entre sus interpretaciones más memorables se encuentra su actuación en Stalin (1992), que le valió el Globo de Oro a Mejor Actriz de Reparto, y en Enchanted April, que le otorgó otro galardón en la misma categoría. Su versatilidad también brilló en producciones como Daniel el Travieso, 101 Dálmatas y Las Crónicas de Spiderwick, películas que la hicieron conocida por audiencias de todas las edades.

En el ámbito personal, Joan Plowright estuvo casada con Roger Leonard Gage entre 1953 y 1960. En 1961 contrajo matrimonio con el legendario actor Laurence Olivier, conocido como Lord Olivier, con quien compartió su vida hasta el fallecimiento de él en 1989, a los 82 años.

El legado de Joan Plowright perdura como un testimonio de su pasión y excelencia artística, tanto en el teatro como en el cine. Su contribución a las artes escénicas será recordada por generaciones futuras como un símbolo de compromiso, talento y dedicación.